Editorial de la revista Punto a Punto
Reflexionamos como Libre Pensadores
Desde que surgimos como revista, como libre pensadores, nos hemos comunicado
con los lectores siempre desde afuera de cualquier insignia partidaria. Sólo hemos
puesto nuestros informes, comentarios, opiniones con un sentido claro de ciudadanos
comprometidos con la comunidad y nunca con partido político alguno. Nos ha guiado la
visión artiguista de la Patria Grande y sigue siendo nuestro objeto el vivir mejor como
ciudadanos ya fueran descendientes de americanos, europeos, africanos, asiáticos, u
originarios de la América Indígena que luego fuera colonizada por medio del exterminio
convirtiéndose en el mayor holocausto de la humanidad.
Más que oportuno creemos, necesario, aclarar nuestra posición con los partidos políticos
para que no haya confusiones ni falsas interpretaciones.
En muchos artículos publicados hemos partido de la verificación que Artigas fue el
gran traicionado en la joven historia de la República. A través de los años, nuestros
gobernantes se han alejado de sus principios, cada vez más, hasta llegar al momento
actual en que se ha vendido el rico patrimonio de los orientales al vil precio de una
falsa necesidad. Es decir no se ha tenido en cuenta el ideario de un prócer que decimos
respetar y muy descaradamente le siguen haciendo homenajes que se convierten en
“festicholas para chupar y lastrar” a costillas del pueblo sufrido.
Quizá usted piense que es muy fuerte lo que decimos pero en muchas ocasiones
nos preguntamos si somos los únicos que vemos así los hechos cotidianos que nos
diferencian de “ellos los gobernantes”, con beneficios que ellos mismos se otorgan y
“nosotros los gobernados” que toleramos estas inequidades diarias.
No renegamos de los partidos políticos porque son una herramienta para gobernar.
Pero… cuando los partidos políticos se transforman en colectividades cerradas que
actúan sin responsabilidad, sin ética, sin contemplar lo que el pueblo que los votó
quiere, y se transforman en un conglomerado con apetencias de poder y de dinero para
mantener un status quo diferente al ciudadano que los votó, funcionando como una
corporación ajena a los intereses del país y sumisos ante el poder económico que los
orienta, no responden a la esencia de lo que es un Partido Político y pasan a ser un club
de privilegiados… Lo peor y triste del asunto es que ellos lo hacen porque no tienen
quien les ponga freno, ni hay una herramienta válida para echarlos cada vez que hacen
mal las cosas, ni la gente hace nada por modificar esta situación ya que cada cinco años
se reitera el episodio y los únicos que ganan “son ellos”.
Hay algunas preguntas entonces que nos hacemos y le queremos trasladar a ustedes para
que en su fuero interior se las conteste. Alguna de ellas son:
¿Por qué a cualquier ciudadano que trabaja le aplican impuestos, por tener una pequeña
empresita le aplican impuestos, y a las grandes empresas nacionales o extranjeras las
exoneran de tributos?
¿Por qué un legislador se aumenta el sueldo que tenía en enero pasado que era de $240
mil a 347 mil pesos, cuando ellos mismos condicionan a través de los Consejos de
Salarios, el aumento para los trabajadores a un 8% como máximo, cuando la mayoría,
unos 800 mil trabajadores, sólo ganan alrededor de $14.000?
¿Por qué nunca cumplen las promesas al electorado que mencionan en las plataformas
de gobierno prometidas para ser electos, ni la gente les exige que cumplan?
¿Por qué a la gente la compran con beneficios a través del Mides y no generan fuentes
de trabajo para que puedan tener ese dinero o más, como retribución a una labor
¿Por qué el país está endeudado en más de 40 mil millones de dólares, si ellos
promocionan que en la balanza comercial han tenido superávit? y usted ¿no quiere saber
dónde está o en qué se gastó esa suma de dinero?. No olvide que la deuda la pagamos
¿Por qué ante el cierre de PLUNA que nos dejó una pérdida de más de 400 mil millones
y aún no hay resolución judicial, mientras que usted si trabaja en cualquier lugar, si
comete algún error leve, lo sancionan o echan?
Hay muchas preguntas más y hay mucho tiempo para meditar y reflexionar de aquí a las
elecciones nacionales o departamentales y sólo a usted le cabe la responsabilidad de lo
que vaya a hacer en esa oportunidad.
Quizás ahora entienda mejor el porqué de nuestra insistencia sobre la necesidad de
iniciar en nuestras aulas una auténtica educación cívica, y del porqué proponemos un
cambio radical de este sistema perverso, a partir de una Constituyente convocada por
ciudadanos que no integren partidos políticos, para poner a juicio de la población una
Nueva Constitución.
Es de rigor recomendar a nuestros oyentes que tengan dudas a quien votar, que no lo
hagan por el “menos malo” ni por un voto en blanco que en la actualidad es interpretado
como un “voto a la marchanta” y sí lo hagan anulando su voto, sí anulando su voto
porque significa que no está de acuerdo con ninguno de los candidatos que integran los
partidos que se presenten. Quizá con este procedimiento empiecen a darse cuenta que ya
no nos llevan con cuentos y reaccionen para cumplir con los deberes de la Nación y lo
que la ciudadanía les demande.Reflexionamos como Libre Pensadores
Desde que surgimos como revista, como libre pensadores, nos hemos comunicado
con los lectores siempre desde afuera de cualquier insignia partidaria. Sólo hemos
puesto nuestros informes, comentarios, opiniones con un sentido claro de ciudadanos
comprometidos con la comunidad y nunca con partido político alguno. Nos ha guiado la
visión artiguista de la Patria Grande y sigue siendo nuestro objeto el vivir mejor como
ciudadanos ya fueran descendientes de americanos, europeos, africanos, asiáticos, u
originarios de la América Indígena que luego fuera colonizada por medio del exterminio
convirtiéndose en el mayor holocausto de la humanidad.
Más que oportuno creemos, necesario, aclarar nuestra posición con los partidos políticos
para que no haya confusiones ni falsas interpretaciones.
En muchos artículos publicados hemos partido de la verificación que Artigas fue el
gran traicionado en la joven historia de la República. A través de los años, nuestros
gobernantes se han alejado de sus principios, cada vez más, hasta llegar al momento
actual en que se ha vendido el rico patrimonio de los orientales al vil precio de una
falsa necesidad. Es decir no se ha tenido en cuenta el ideario de un prócer que decimos
respetar y muy descaradamente le siguen haciendo homenajes que se convierten en
“festicholas para chupar y lastrar” a costillas del pueblo sufrido.
Quizá usted piense que es muy fuerte lo que decimos pero en muchas ocasiones
nos preguntamos si somos los únicos que vemos así los hechos cotidianos que nos
diferencian de “ellos los gobernantes”, con beneficios que ellos mismos se otorgan y
“nosotros los gobernados” que toleramos estas inequidades diarias.
No renegamos de los partidos políticos porque son una herramienta para gobernar.
Pero… cuando los partidos políticos se transforman en colectividades cerradas que
actúan sin responsabilidad, sin ética, sin contemplar lo que el pueblo que los votó
quiere, y se transforman en un conglomerado con apetencias de poder y de dinero para
mantener un status quo diferente al ciudadano que los votó, funcionando como una
corporación ajena a los intereses del país y sumisos ante el poder económico que los
orienta, no responden a la esencia de lo que es un Partido Político y pasan a ser un club
de privilegiados… Lo peor y triste del asunto es que ellos lo hacen porque no tienen
quien les ponga freno, ni hay una herramienta válida para echarlos cada vez que hacen
mal las cosas, ni la gente hace nada por modificar esta situación ya que cada cinco años
se reitera el episodio y los únicos que ganan “son ellos”.
Hay algunas preguntas entonces que nos hacemos y le queremos trasladar a ustedes para
que en su fuero interior se las conteste. Alguna de ellas son:
¿Por qué a cualquier ciudadano que trabaja le aplican impuestos, por tener una pequeña
empresita le aplican impuestos, y a las grandes empresas nacionales o extranjeras las
exoneran de tributos?
¿Por qué un legislador se aumenta el sueldo que tenía en enero pasado que era de $240
mil a 347 mil pesos, cuando ellos mismos condicionan a través de los Consejos de
Salarios, el aumento para los trabajadores a un 8% como máximo, cuando la mayoría,
unos 800 mil trabajadores, sólo ganan alrededor de $14.000?
¿Por qué nunca cumplen las promesas al electorado que mencionan en las plataformas
de gobierno prometidas para ser electos, ni la gente les exige que cumplan?
¿Por qué a la gente la compran con beneficios a través del Mides y no generan fuentes
de trabajo para que puedan tener ese dinero o más, como retribución a una labor
¿Por qué el país está endeudado en más de 40 mil millones de dólares, si ellos
promocionan que en la balanza comercial han tenido superávit? y usted ¿no quiere saber
dónde está o en qué se gastó esa suma de dinero?. No olvide que la deuda la pagamos
¿Por qué ante el cierre de PLUNA que nos dejó una pérdida de más de 400 mil millones
y aún no hay resolución judicial, mientras que usted si trabaja en cualquier lugar, si
comete algún error leve, lo sancionan o echan?
Hay muchas preguntas más y hay mucho tiempo para meditar y reflexionar de aquí a las
elecciones nacionales o departamentales y sólo a usted le cabe la responsabilidad de lo
que vaya a hacer en esa oportunidad.
Quizás ahora entienda mejor el porqué de nuestra insistencia sobre la necesidad de
iniciar en nuestras aulas una auténtica educación cívica, y del porqué proponemos un
cambio radical de este sistema perverso, a partir de una Constituyente convocada por
ciudadanos que no integren partidos políticos, para poner a juicio de la población una
Nueva Constitución.
Es de rigor recomendar a nuestros oyentes que tengan dudas a quien votar, que no lo
hagan por el “menos malo” ni por un voto en blanco que en la actualidad es interpretado
como un “voto a la marchanta” y sí lo hagan anulando su voto, sí anulando su voto
porque significa que no está de acuerdo con ninguno de los candidatos que integran los
partidos que se presenten. Quizá con este procedimiento empiecen a darse cuenta que ya
no nos llevan con cuentos y reaccionen para cumplir con los deberes de la Nación y lo
que la ciudadanía les demande.
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